P�gina Principal
Staff
Ultimo Editorial
Ultimo Horizonte en PDF
Ultimos Artículos
Dossiers
La Noticia del Día
Revistas Anteriores
Art�culos Recomendados
Archivo de Art�culos
Links Recomendados
Registro
Contacto
 
 
 

Navegar es preciso

Israel en crisis

Autor: Ariel   Bercovich
Crisis econ�mica, de liderazgo, de guerra, de �nimo. El terrorismo que no cesa, la paz que se niega a llegar. Israel pasa por uno de los momentos m�s duros de su historia, que de por s� no ha sido f�cil.

Es sabido que el pueblo de Israel tiene por hobby buscar analog�as entre sucesos actuales y relatos b�blicos. La naturaleza c�clica de la lectura de la Biblia, enfrentada al avance lineal de la historia, genera una especie de espiral asociativo en el que todo avanza y a la vez todo se vuelve a repetir. Cuando chico uno de los relatos b�blicos que m�s me gustaban era Miketz, en el que Iosef es conducido ante el Fara�n para que le revele el significado se sus sue�os. En uno de los sue�os del Fara�n siete vacas flacas comen siete vacas gordas, y sin embargo quedan flacas. En otro, siete juncos enfermos se comen siete juncos sanos. Iosef induce que los sue�os del Fara�n vienen a alertar acerca del futuro de Egipto: a siete a�os de prosperidad, seguir�n siete a�os de sequ�as. Iosef no se contenta con analizar los sue�os, sino que transforma su visi�n en un programa econ�mico que deja encantado al Fara�n: los siete a�os de prosperidad ser�n aprovechados para ahorrar alimento, y as� sobrevivir los siete a�os venideros, menos pr�speros.

Israel 2003 atraviesa una de las crisis m�s profundas de su historia. Como en el relato b�blico, a siete a�os de estabilidad econ�mica y progreso (1992-1999), sobrevienen a�os de recesi�n y grandes conflictos sociales. Como en el relato b�blico, ambas etapas llegaron sin una explicaci�n racional visible. Hasta aqu� la analog�a. La diferencia entre pasado y presente est� dada por la ausencia de Iosef. La ausencia de un profeta que predijera que la euforia del Hi-Tech y las conversaciones de paz se terminar�a de la noche a la ma�ana, y le sobrevendr�an a�os duros y angustiosos. �D�nde est�n las se�ales divinas cuando uno las necesita?... Lo que sigui� a aquellos a�os pr�speros fue una desestabilizaci�n de todas las instituciones: crisis econ�mica, crisis social, crisis pol�tica, crisis diplom�tica, crisis cultural, crisis de identidad, crisis militar, son s�lo algunas de las crisis que ocupan al pueblo de Israel en estos d�as. Cada crisis y sus v�ctimas. Cada v�ctima y sus angustias.

UNA CRISIS COMO NINGUNA

�Qu� diferencia a esta crisis actual, de otras que Israel atraves� en el pasado, o de crisis que atraviesan otros pa�ses? En primer lugar, su desencadenamiento abrupto. Si bien habr� quien anuncie que �hace tiempo que ven�a avisando...�, lo cierto es que sucesos como el inicio de la segunda Intifada, o la primera ola de despidos masivos, fueron declarados por la mayor�a de los analistas como �eventos puntuales� que no amenazaban la estabilidad. En segundo lugar, la complejidad de la crisis que, al estar conformada de cientos de factores que interact�an, se vuelve imposible de analizar en tiempo real.

En tercer lugar, la forma escalada del deterioro, una vez comenzado. La crisis actual puso a prueba una vez m�s el famoso poder de adaptaci�n del pueblo jud�o. Sucesos que en un principio parec�an intolerables, fueron cediendo lugar a sucesos m�s intolerables a�n. Los disparos al barrio de Guil� en Jerusalem, que parec�an el �ltimo de los l�mites que quedaba por cruzar, se volvieron rutina en menos de un mes. Lo mismo sucedi� con los atentados terroristas, los despidos masivos, la devaluaci�n del shekel, el disparo de los misiles Kazam a la ciudad de Sderot, y el secuestro de los soldados en el l�mite L�bano-Israel. Cada uno fue a su turno insoportable, y luego parte de la vida diaria.

En cuarto lugar, la naturaleza fatal de su desencadenamiento. Como en la tragedia griega, la crisis actual apareci� como una especie de maldici�n irrevocable, sin raz�n y sin soluci�n aparente. As� como los a�os de prosperidad llegaron sin pedir nada a cambio, se marcharon sin dar explicaciones.

OH, QUE SERA, QUE SERA.

Quiz�s a los historiadores del pr�ximo siglo les sea dado comprender cu�l fue la causa de esta crisis abrupta y general, y por lo tanto darle el nombre adecuado. �Quiz�s �La gran depresi�n�?, �o �La nueva pesadilla del Fara�n�?, o ��El regreso de la Intifada�? Quiz�s en 200 a�os un estudiante lea en su libro de historia el cap�tulo acerca de estos d�as, y se pregunte �como no vieron que la soluci�n era tan simple?� Pero como es sabido, en Israel se vive d�a a d�a, y medidas como siglo y aun d�cada se aparecen fant�sticas, casi imaginarias. Por lo tanto el pueblo de Israel tom� una decisi�n razonable: �Ya que no comprendemos cabalmente lo que pasa, al menos d�mosle un nombre�. En un principio se eligi� el t�rmino Mashber (Crisis, ruptura). Pero fue descartado por que estaba demasiado usado. Otros propusieron Tkuf� Kash� (Tiempos Duros). Pero tiempos duros sonaba demasiado literario e impersonal. Finalmente se decidi� por el t�rmino m�s obvio, m�s amplio, y a la vez m�s exacto que el idioma pod�a ofrecer: HaMatzav.

El diccionario define la palabra Matzav como �Posici�n, situaci�n, condici�n, estado�. Como se ve, en su acepci�n original es una palabra m�s bien gris y acad�mica. Y efectivamente hasta hace unos a�os parec�a condenada a poblar textos de orden legal y period�stico. Pero desde que fue declarada nombre oficial de lo que sucede en el pa�s, no tiene un minuto de descanso. El Matzav es todo: la situaci�n econ�mica, la raz�n por la cual no se sale de vacaciones, la raz�n por la que se vuelve antes al pa�s, por la que no se viaja en colectivo, por la que se hace miluim, la excusa para no ir a lo de la t�a, la raz�n por la que hay elecciones, y la raz�n por la que nadie quiere votar. El Matzav es a la vez causa y consecuencia de lo que ocurre. Todo cabe dentro del Matzav.

Imaginemos un di�logo posible:

-�Y? �Se casan en marzo, nom�s?

-Quer�amos, pero estamos pensando en postergar.

-�En serio? �Por qu�?

-Y, por el Matzav...

-Ah, claro.

Si este di�logo sucedi� hace una semana, el matzav es el posible ataque de Estados Unidos a Irak. Si sucedi� hace un mes, la inestabilidad del d�lar. Si sucedi� hace tres meses, los despidos colectivos. Si hace un a�o, la serie de atentados terroristas en bar-mitzvas y casamientos. De aqu� que la palabra HaMatzav cumple un papel m�s terap�utico que ling��stico. �C�mo funciona esa terapia? Al israel� promedio le es imposible abarcar toda la realidad de una sola vez. Los medios de comunicaci�n lo bombardean con millones de datos cada d�a. La cantidad de sucesos que ocurren en una semana en Israel, bastan para llenar los diarios de un mes en cualquier pa�s normal. Tantas veces se bifurca cada noticia, que basta concentrarse en una de ellas, para olvidar para siempre las dem�s. Cada d�a le es anunciado que el pa�s est� por quedarse sin agua, al borde de la guerra, y del estallido social. Luego un batall�n de analistas intenta en vano explicarle por qu�. Todo esto produce en el israel� medio un cansancio intelectual que a la larga le impide pensar en la realidad sin que le d� un fuerte dolor de cabeza. All�, justamente, entra en acci�n el secreto de la palabra HaMatzav: logra el milagro de abarcar toda la realidad de una sola vez. Sin necesidad de entenderla o asimilarla. as� de simple. Como una especie de embudo gigante a trav�s del cual se puede espiar, para acaparar toda la realidad en un solo punto. La palabra matzav es la herramienta que adopt� el pueblo israel� para poder establecer un di�logo con la realidad, sin que �sta lo aplaste. Hoy, como en la prehistoria, el hombre da nombre a lo incomprensible para dominarlo. As� es que la palabra HaMatzav es la moneda corriente de la vida diaria israel�. La fogata en torno a la cual danzan las 12 tribus de Israel.

EL FILO DE LA NAVAJA

Pero claro que el Matzav es un asunto demasiado real para confinarlo a campos abstractos como la ling��stica o la sociolog�a. Quiero decir que cuando f�bricas cierran o un colectivo explota, poco importa ya qu� nombre se le d�. Y justamente all� comienza el peligro de las palabras destinadas a denominar la realidad: suele ocurrir que en vez de reflejarla la ocultan. Ejemplos no faltan. Basta sintonizar el canal que transmite en directo desde el parlamento. Por eso la palabra HaMatzav, y otras parecidas, son un arma de doble filo. Por un lado logran reducir una realidad angustiosa y abrumadora a t�rminos con los que se puede mantener un di�logo razonable. El hombre dio nombre a los sucesos m�s terribles: �violaci�n�, �suicidio�, �atentado�, �Holocausto�. Esos nombres le permiten mantenerse en contacto con lo sucedido sin tener que exponerse a ellos cara a cara. Las convenciones ling��sticas tambi�n generan lugares comunes, que act�an como elementos aglutinantes en sociedades heterog�neas como la israel�. Religosos y laicos, mizrajim y ashkenazim, j�venes y adultos, hombres y mujeres, todos comparten el Matzav.

Pero por otro lado, esa capacidad de abstracci�n las convierte en armas peligrosas cuando caen en manos de demagogos. Por que es mucho m�s f�cil hablar de ��pocas duras�, y �acontecimientos tr�gicos� que de hambre y muerte. Esos lugares comunes logran reducir la realidad a t�rminos abstractos, pero no siempre permiten el camino opuesto. En ese sentido la palabra Matzav suele adormecer a los que la utilizan. Parada a mitad de camino entre la gente y la realidad, vuelve tolerable lo intolerable. Y esto �ltimo puede ser muy bueno de a ratos, pero es muy malo si dura demasiado. Como un ancla que en medio de la tormenta evita que el barco se hunda, pero el resto del tiempo le impide navegar. Y ya saben ustedes lo que dicen los argonautas de Caetano Veloso sobre el navegar...

Diccionario

Euforia del Hi-Tech: Durante buena parte de los a�os '90, empresas dedicadas a la inform�tica y la alta tecnolog�a produjeron un desarrollo econ�mico desmesurado, en relaci�n al tama�o del mercado econ�mico israel�.

Intifada: El nombre en �rabe de la revuelta palestina contra la dominaci�n israel� en los territorios ocupados.

Guil�: Barrio de Jerusalem ubicado a unos 300 metros del poblado �rabe Beit Djala. Francotiradores palestinos aprovechan la cercan�a f�sica para atacar a los pobladores de Guil�.

Misiles Kazam: Misiles de corto alcance y m�nima precisi�n elaborados por los grupos terroristas palestinos, para atacar las ciudades israel�es m�s cercanas a los territorios. Entre ellas, Sderot.

Sderot: Ciudad ubicada al suroeste de Israel, no lejos de la Franja de Gaza.

Miluim: Servicio militar de los reservistas.

Mizrajim y Ashkenazim: De origen oriental y occidental respectivamente.